CÓMO EDUCAR A UN ADOLESCENTE

La adolescencia representa quizás una de las épocas más difícil y controversiales del desarrollo y crecimiento de una persona. Suele manifestarse como una etapa de contradicciones, rebeldía e  inestabilidad emocional durante la cual los hijos pueden llegar a mostrarse un poco resistentes a las normas, límites y peticiones de las figuras de autoridad presentes en sus vidas (padres, abuelos, profesores).

Algunas recomendaciones para adolescentes 

Lo primordial es procurar mantener una comunicación constante y fluida con su(s) hijo(s) adolescente(s). Escúchele e intente comprender sus peticiones o planteamientos. El equilibrio ideal está en reconocer y respetar sus derechos de manera equitativa con respecto a sus obligaciones o deberes. Ha de aprender que la vida implica responsabilidades y que las cosas se ganan con esfuerzo y dedicación.

Intente resaltar los logros y lo positivo del comportamiento de su(s) hijo(s). No se afane en sancionar, castigar y recordar permanentemente lo negativo. Comience a dar más peso e importancia a lo que hace bien y exprésele verbalmente su orgullo y satisfacción.

Se hace indispensable cultivar un clima de confianza y armonía con su(s) hijo(s) adolescente(s). Evite juzgarle permanentemente por sus acciones o pensamientos y en su lugar, oriéntelo y aconséjelo.

Trate de evitar el aislamiento y ensimismamiento de su(s) hijo(s) procurando compartir actividades recreativas, deportivas o del hogar, de manera que queden reducidos los espacios  y momentos de soledad típicos de los jóvenes durante esta etapa de crecimiento y desarrollo en la que tienden a aislarse y mantenerse alejados de los adultos.