¿Conoces la importancia de los signos de puntuación?

Además de la adecuada selección de ideas a expresar, para que un texto realmente pueda tener sentido, es fundamental hacer uso de los signos de puntuación ya que estos hacen parte de las herramientas que tenemos a disposición para intentar reproducir la entonación del lenguaje oral, es decir todo lo referente a pausas, matices de voz, gestos, cambios de tono, etc., esto con el objetivo de interpretar y comprender correctamente el mensaje protagonista del acto comunicativo.

Puesto que algunas de las funciones más significativas de estos signos ortográficos se resumen en darle estructura al texto, diferenciar las frases, delimitar oraciones y párrafos, y asimismo hacer más simple el destacar las ideas principales, es propio viajar tiempo atrás para anotar que en épocas pasadas los escritos carecían de ellos, así que por obligación debían ser leídos en voz alta para intentar lograr la entonación adecuada que facilitara el que fuesen comprendidos.

Los signos de puntuación y la comunicación

Considerando que la trascendencia de estos signos se fundamenta en el hecho de que determinan el sentido de las frases y la manera en la que se aborda el estilo del manuscrito, estas herramientas son las que ayudan a poner en orden las ideas para acudir con las mejores garantías al uso de un recurso tan valioso como puede serlo el lenguaje oral y escrito.

Puesto que en el idioma español, tanto el uso del signo de interrogacion como de los otros signos principales de puntuación (el punto, la coma, los dos puntos, el punto y coma, las comillas, los paréntesis, signos de exclamación, puntos suspensivos, guion y raya) su manejo entre las palabras permite señalar un ritmo, una intención y por supuesto una fluidez apta para el desarrollo de cualquier clase de discurso.

Principales funciones de la puntuación

  • Orden y claridad: un texto siempre debe estructurarse desde lo más elemental para llegar a lo complejo.
  •  Legibilidad: en primera instancia, quien escribe debe asegurarse de establecer qué es lo que quiere comunicar para así utilizar los recursos que le ayuden a que el lector realmente pueda comprender lo planteado.
  • Precisión: siempre debe existir algo específico para informar, de lo contrario, no habría claridad respecto a cómo emplear los signos de puntuación.

Acudiendo a que, si escribiéramos todo al mismo tiempo no habría posibilidad alguna de una comunicación lineal, apropiarse de cada uno de los signos de puntuación es una labor vital para la adecuada comunicación.