¿Cuál es el significado cristianos de los 10 mandamientos?
Los Diez Mandamientos son la piedra angular tanto de la fe judía como de la cristiana. Los tres primeros mandamientos rigen la relación de las personas con Dios. Los siete mandamientos restantes rigen las relaciones interpersonales.
Los Diez Mandamientos están contenidos en el Antiguo Testamento de la Biblia. Son el núcleo de muchos de los mandamientos que los cristianos debían cumplir. Según la Biblia, Dios entregó a Moisés dos tablas de piedra. Se afirma que los Diez Mandamientos fueron grabados en ellas por el propio Dios.
¿Cuál es el significado de los Diez Mandamientos?
El hebreo es el idioma del Antiguo Testamento. Por ello, primero hay que traducirlo todo. Asimismo, los Diez Mandamientos no están escritos en forma de lista, sino en una serie de frases y versículos bíblicos, que crean los mandamientos que Dios nos inculca para cumplir.
Muchos teólogos han investigado el tema y han formulado los Diez Mandamientos.
1. Amarás a Dios sobre todas las cosas.
2. No tomarás el nombre del Señor tu Dios en vano.
3. Santificarás las fiestas.
4. Honrarás a tu padre y a tu madre.
5. No matarás.
6. No cometerás actos impuros.
7. No robarás.
8. No darás falso testimonio ni mentirás.
9. No consentirás pensamientos ni deseos impuros.
10. No codiciarás los bienes ajenos.
¿Cuándo recibió Moisés los Diez Mandamientos?
10 Mandamientos. Foto por Tumisu en Pixabay.
Los diez mandamientos fueron pintados en un panel por el pintor Lucas Cranach.
En el Antiguo Testamento se describe a los judíos como el pueblo favorecido por Dios. Los judíos se vieron obligados a huir a Egipto, donde Moisés los condujo. Esta historia se encuentra en el segundo libro de la Biblia, «Éxodo». Es una palabra hebrea que significa «Éxodo».
Moisés se detuvo en el Monte Sinaí a lo largo de la ruta, que aún hoy se conoce como tal. Dios se le apareció en oración y le entregó dos tablas de piedra. En ellas estaban grabados los Diez Mandamientos, tal como los conocemos ahora por las lápidas.
Moisés leyó entonces los mandamientos de las dos tablas a su pueblo. Mientras tanto, los aldeanos habían fabricado un becerro de oro y bailaban alrededor de él. «¡Este es el Dios que nos sacó de Egipto!», exclamó la multitud. Las dos tablas de piedra de la ley fueron entonces destruidas por Moisés, que se enfureció.
Entonces Moisés volvió a escuchar la voz de Dios en la oración, pidiéndole que trajera él mismo dos nuevas tablas de piedra a la montaña. Dios volvió a decir los Diez Mandamientos a Moisés, y esta vez él mismo los grabó en las tablas de piedra. Las devolvió a su gente. Sin embargo, el rastro de estas tablas de piedra desapareció entonces.
¿Quién necesita los Diez Mandamientos en el mundo actual?
Lo más probable es que el número diez se deba a que contar los mandamientos con los dedos facilitaba su recuerdo. A la izquierda está el «amor a Dios» (supremo, ídolos, falta de respeto, sábado, padres) y a la derecha el «amor al prójimo» (supremo, ídolos, falta de respeto, sábado, padres) (asesinato, adulterio, robo, mentira, codicia).
Los Diez Mandamientos siguen aplicándose a los judíos hoy en día. Como Dios es el único que los escribió, son el núcleo de muchas leyes. La mayoría de las leyes, incluidos los Diez Mandamientos, se reescriben en el quinto libro de la Biblia. Entre la primera y la segunda enumeración hay pequeñas variaciones. Debido a que los judíos y los cristianos dividieron el texto hebreo en frases de diversas maneras, los Diez Mandamientos se numeraron de forma diferente.
Los Diez Mandamientos siguen siendo válidos para los cristianos. Jesús nunca los enunció todos a la vez, pero sí mencionó algunos. Los endurecía aún más y decía cosas como: «No sólo no debes romper un matrimonio, sino que ni siquiera debes considerarlo». Sin embargo, a diferencia del judaísmo antiguo, el que cree en el perdón de Dios, y no el que cumple todos los Diez Mandamientos, es el que va al cielo.
Las imágenes están prohibidas en la Iglesia anglicana: «No te harás ninguna imagen». Es el segundo de los Diez Mandamientos. El noveno y el décimo mandamiento están unidos en un solo mandamiento, ya que la numeración no es adecuada.
En el Islam no hay ninguna enumeración de los Diez Mandamientos. El Corán, en cambio, hace hincapié regularmente en los Diez Mandamientos específicos. Tienen un sonido inquietantemente comparable al del Antiguo Testamento.