Consejos para prevenir el embarazo adolescente

Son variados los factores que influyen en la incidencia de esta problemática social que si bien ha sido objeto de muchas campañas de prevención aún falta bastante para lograr concienciar sobre sus efectos a corto, mediano y largo plazo. Sabiendo que hablar puntualmente de los riesgos del embarazo precoz no siempre pone en alerta a la población adolescente, nos proponemos entonces abordar esta compleja situación desde lo que podemos hacer para evitarla.

Puesto que las cifras en este sentido son el mejor indicador para mostrarnos que el embarazo adolescente continua presentándose, veamos lo que puede estar al alcance para postergar un poco la maternidad.

Cómo prevenir el embarazo precoz

  • Acceder a programas educativos. Tanto los colegios como las autoridades de gobierno cada vez se preocupan más por ofrecer información pertinente que busca educar a los chicos y chicas en la sexualidad, por lo tanto se recomienda participar en ellos de manera activa para tener total claridad sobre salud reproductiva.
  • Buscar orientación pertinente. Aquello de preguntarle al amigo de mayor experiencia sobre métodos de planificación y posibles consejos no siempre trae buenas experiencias. Lo recomendable es solicitar un acompañamiento médico o de algún profesional que con responsabilidad asesore e indique los pasos a seguir para estar protegido en todo sentido al iniciar la vida sexual.
  • Controlar el consumo de alcohol y otras sustancias. Las fiestas y reuniones sociales se prestan para que los chicos accedan a este tipo de drogas y con su consumo se vuelven un poco más susceptibles a dejarse llevar sin pensar en posibles consecuencias o en definitiva hacer lo posible por mantener su integridad.
  • Esperar el momento adecuado. A veces suena casi que imposible que un adolescente pueda tomar la decisión de optar por la abstinencia mientras siente que alcanza la madurez necesaria para iniciar su vida sexual, sin embargo esto es algo que puede implementarse no a manera de represión sino como un medio para que cuando llegue el momento cuenten realmente con las herramientas para pensar en lo que viene después del momento de placer.
  • Estimular los valores. Lo más apropiado es educar en valores que lleven a crear conciencia sobre lo fundamental de respetar el cuerpo, de la responsabilidad que implica la vida sexual y de la creación de un proyecto de vida estructurado donde exista un tiempo para cada paso.

Tanto padres como maestros deben trabajar en equipo para que los adolescentes logren dimensionar su sexualidad y consigan orientar su vida de acuerdo a sus metas y no a lo que ocurre en el momento.